20 febrero, 2008

Texto a la Depresión


Te llevo en mi lágrima salada,
en la mirada fortuita y en aquellos destellos
que no quieren abandonarme a mi declive...

Ú
ltimamente he tenido ganas de hablar con alguien que me de un par de sacudidas serias...
de esas personas que te sacan de todos los agujeros con solo voltear la cara y sonreir...
nunca pensé que en un año y medio fuera aprender más del "mundo" que en todo lo que llevaba de vida, y aún así sigo siendo una niña inocente...
últimamente me siento fuera de lugar en todos lados...
no soporto estar sola, pero no quiero salir a ningun lado...
me baño en recuerdos envenenados de melancolía, con la sangre contaminada de todo el alcohol de su piel y su aliento..
Ya no lo quiero tener conmigo pero no quiero que sea de nadie...
prefiero verlo morir alcoholizado

(como siempre me juro que moriría feliz)

y fumarme un par de cigarros

(alabando tanto al cancer como a su memoria)

Todos repiten, insisten en lo mucho que me amaba, en como está simplemente evitando recordárme, al fin y al cabo ya no importa...
hace ya casi dos meses y el hace ya un mes con una nueva ¿"yo"?...
digo que tanto sabe ella de lo que le espera con él... yo mientras tanto sigo sumida en esas depresiones que no sabía que existían... de esas que son, clínicamente hablando, una DEPRESIÓN.
Caray si tengo todos los síntomas y nunca lo imaginé... es realmente necesario que encuentre la felicidad que solía tener...
el único problema es que no sé en cual botella la arroje al mar, encontré mi amor propio en una botella que se rompió en un arrecife...
pero no ha servido de mucho porque sigo buscando todas las cosas que a mi loco parecer eran inútiles en los sagrados momentos a su lado...
he encontrado rastro de mi fe, abollada y rota...
y he encontrado el hilo, ya casi perdido, que me unía con el mundo exterior, encontré unas gotas de paranoia que no eran mías pero que han llenado un vacío inexistente en mi cabeza, me envenenan la mente... hasta pensar en cuanto me persigue y en todo lo que puede lograr...
lo supe desde el primer momento en que cruzó mi puerta, "por este hombre voy a morir.. por sus medios, en sus manos... o por su manos"
y aun así...
acepte y que la voracidad de su vida ahogara la mía...

hora no hay necesidad de respuesta.. esas necesito encontrarlas yo...
Gracias por darme un recuerdo al que aferrarme con alegría y un abrazo en el que sentirme bien... Gracias por todo... especialmente gracias por leer...
Estoy contigo en mi forma astral.. siempre presente...



Algún día entre 2002 y 2005
correo para Alejandro C.D.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Leyéndote me transporté de una manera tan familiar a esa tristeza recurrente en mi vida. Tanto así que la siento casi biográfica.
No cabe duda que hay veces que los malos momento sacan lo mejor de uno.